Analizamos Chiara, herramienta que combina realidad virtual e IA para mejorar una soft skill tan importante como hablar en público
Chiara es una herramienta que combina la realidad virtual y la inteligencia artificial para mejorar una soft skill tan importante como hablar en público. Recientemente ha sido seleccionada como representante española de Lightspeed, la primera aceleradora europea de startups centradas en cuestiones legales y jurídicas del mundo, una iniciativa desarrollada por el Grupo Lefebvre Sarrut del que forma parte Lefebvre. Pero creemos que lo mejor de Chiara son su CEO, Soraya del Portillo, y su Director de Negocio, Antonio Serrano Acitores. Una lástima no poder tener esta conversación con ellos en formato vídeo porque estos dos cracks transmiten muchísima energía cuando hablan de su criatura, una propuesta súper innovadora llamada a revolucionar las actuales fórmulas formativas.
Soraya, empecemos por la marca: ¿Por qué Chiara? Especialmente, te lo pregunto porque hace tiempo que vemos cómo asistentes virtuales, chatbots, RPA, etc., son ‘bautizados’ con nombre de mujer. Como muestra, unos pocos botones en el sector legal: Matilda, el RPA de EMC Soluciones Legalgech; Aretha, el chatbot que la firma legal Ontier diseñó junto a Lefebvre; Alma, el asistente virtual de Mutualidad de la Abogacía. ¿Puede ser un intento de humanizar la tecnología?
Soraya del Portillo. Es una pregunta que nos hacen frecuentemente pero pocas personas hacen esa reflexión. La IA suele llevar nombre de mujer para hacerla más amable, más amigable: Siri, Cortana, Alexa… Y Chiara es Clara en italiano. El segundo motivo es muy importante y es que si una ponencia debe tener una característica básica, es que debe ser clara. Además, si te fijas en las vocales, IA vincula a la inteligencia artificial. Y a su lado, tenemos la A como si fuera V invertida al lado de la R: Realidad Virtual. Y para rematar, en Chiara tenemos algo único: hacemos descomposición del sonido. ¿Qué significa? Pues que cogemos el audio del alumno y hacemos descomposición de las ondas sonoras. Como puedes ver, las rayitas que aparecen en la última A es la descomposición del sonido.
Habláis en vuestra web de que Chiara es un metaverso educativo. Antonio, acabas de publicar el libro “Metaverso y Derecho”, editado por Tecnos. ¿Hasta qué punto está maduro el metaverso? Por decirlo de algún modo, ¿la experiencia del usuario de Chiara es parecida a la que pueda tener uno al ver la película de Spielberg “Ready Player One”?
Antonio Serrano Acitores. Creo que definir una línea de lo que va a ser el antes y el después del metaverso va a ser complejo porque, efectivamente, los usuarios tienen en la cabeza esta película, pero la realidad virtual no se articula sólo en torno a avatares, también funciona con gemelos digitales. Chiara funciona más en esa línea: es un simulador de realidad virtual con inteligencia artificial en el que básicamente apareces en escenarios en el que hay personas de verdad, mesas y sillas de verdad, y en los que cuando entras parece que estés en una realidad natural, más que en una virtual, en las que van ocurriendo cosas mientras tú hablas y generan un entorno lo más parecido a la realidad con el propósito de que hagas tu práctica. Al final el metaverso no deja de estar en construcción. Es cierto que desde octubre de 2021, cuando Facebook decide cambiar su nombre a Meta, se produce una revolución que ya se estaba fraguando: Microsoft, por ejemplo, ya estaba invirtiendo en fenómenos de realidad virtual. ¿Cuándo nos encontraremos un metaverso al estilo de ”Ready Player One”? Para eso todavía queda mucho. Lo que ocurre es que de algún modo ya estamos todos en metaverso, y me explico. ¿Cuántas horas del día nos pasamos ante un móvil u otros dispositivos? Hacia lo que vamos es hacia fenómenos más inmersivos en el que puedes proyectarte en determinados escenarios, ya sea a través de avatares o de gemelos digitales. Hacia lo que se pretende ir ahora gracias a la agregación de diversas tecnologías (RV, IA, big data, Internet de las cosas…) es darnos una experiencia ciberfísica y multisensorial.
¿Cuál creéis que será el punto de inflexión para que esto aterrice de forma universal? ¿Será la revolución del 5G y 6G? ¿Será cuando las gafas virtuales se puedan encontrar en cualquier tienda de El Corte Inglés con un precio súper competitivo?
Soraya. Cuando creamos el modelo de negocio de Chiara, pensamos en un hardware que no fuera una barrera. Esta gafa que te estoy mostrando y que utilizamos en Chiara tiene un precio aproximado de 20 euros. El coste de las gafas no es una barrera. En ese momento al que aludo sí había un hándicap muy importante para hacer un producto todavía más desarrollado v que es la conectividad. Para ello el 5G es fundamental. El 5G existe actualmente pero está muy limitado, deben existir dispositivos que puedan tirar de ese 5G. Eso sí es una barrera.
Antonio, mencionas en tu libro precisamente ese factor 5G y 6G, y también hablas de la experiencia que tenéis en Spacetechies con Matterport.
Antonio. Spacetechies es una red de centros de formación en competencias digitales. Cuando diseñamos los centros teníamos que ser muy digitales, para generar confianza en los usuarios y para crear los propios gemelos digitales de Spacetechies. Generamos escenarios de realidad virtual y realidad aumentada de cada centímetro de Spacetechies Además, nuestros alumnos nos han construir a diseñar Spacetechies en cuanto a diseño, han estado dibujando lo que sería un escenario para avatares.
«¿Cuándo nos encontraremos un metaverso al estilo de ”Ready Player One”? Para eso todavía queda mucho»
Eso evoca claramente a design thinking…
Antonio. Totalmente. Los chavales cuando lo diseñan aprenden desde geometría hasta visión espacial, y luego desarrollan un proyecto a través de design thinking.
Soraya, en su libro Antonio dice de ti, y le creemos, que eres “una de las empresarias más importantes de este país y que ha sido reconocida por el Gobierno español como una de las mujeres referentes del emprendimiento innovador en España”. La pregunta es obligada: dinos en un minuto, en modo elevator pitch, qué es Chiara.
Soraya. Chiara es el único simulador del mundo que permite que el alumno pueda simular tantas veces como quiera en entornos virtuales de gemelos digitales sus presentaciones en público. Lo más interesante no es que puedas practicar en un entorno que es muy semejante a tu día a día sino que cuando terminas en tu aplicación, gracias a la inteligencia artificial y al procesamiento de lenguaje natural, se genera un feedback totalmente objetivo a través de un coach que te va a decir qué has hecho, cómo lo has hecho y cómo puedes mejorarlo. Y todo ello medido a través de KPI’s objetivos.
«El 5G existe actualmente pero está muy limitado, deben existir dispositivos que puedan tirar de ese 5G»
Chiara tiene varias verticales, pero el legal me decís que se ha lanzado en este pasado marzo. ¿Cuál está siendo el impacto en el mundo jurídico, especialmente en el ámbito universitario? No entendemos por qué, pero el desarrollo de habilidades alrededor de la oratoria y de la comunicación en las Facultades de Derecho está, en general. un poco abandonado, no sé si tenéis esta percepción también.
Antonio. Está teniendo mucho impacto. Presentamos el proyecto en el Colegio de Abogados de Madrid a través de Esther Montalvá, les encantó y estamos estudiando vías de colaboración. También estamos trabajando con seis colegios de abogados para incorporar Chiara a sus Máster de Acceso a la Abogacía o a su oferta formativa. Con Universidades y Escuelas de Negocio también estamos valorando posibles desarrollos.
¿Se resisten las Universidades?
Antonio. Desafortunadamente, sí, porque todavía en este país no se apuesta por la educación todo lo que se debería.
Soraya. Lo acabas de comentar. La oratoria, posiblemente la habilidad más importante en cualquier ámbito, está dejada. Ese es el gran pain de la educación en España, y el 80% de la población sufre de glosofobia, el miedo a hablar en público. Las cosas están cambiando, pero vamos retrasados. En EEUU y Reino Unido trabajan la oratoria desde muy pequeños y aquí sigue siendo algo preocupante. Sí es cierto que algo está cambiando, y desde Chiara estamos auspiciando una iniciativa para mejorar la oratoria en los niños a través de un desarrollo gamificado.
«Chiara es el único simulador del mundo que permite que el alumno pueda simular tantas veces como quiera en entornos virtuales de gemelos digitales sus presentaciones en público»
Soraya, eres la socia principal de Chiara, y a principios de 2022 se incorpora Antonio, un jurista muy reconocido, especialmente en derecho tecnológico, liderando el área de desarrollo de negocio, y nos da la impresión que es mucho más que eso: es tu mano derecha. ¿Por qué él? ¿Por su perfil jurídico o por su carácter emprendedor? ¿O por ambas cosas?
Soraya. Por admiración. Antonio es una caja de conocimiento brutal pero también transmite mucha energía. Te pongo un ejemplo. Nuestros clientes son grandes empresas, muchas de ellas del Ibex 35, y cuando haces un repaso y te preguntas «¿qué sector me falta?», de repente te encuentras que te falta el sector legal. Y tras asistir a un par de juicios como observadora te dices «¡Qué mal lo están haciendo!» «¡Qué pain más importante tenemos en la abogacía española en oratoria!» Viendo ese problema intenté buscar maneras de desarrollar soluciones y resulta que Antonio, además, tiene como talento anexar personas, anexar oportunidades, y me dijo: “Tengo la persona: Purificación Pujol”. Y ella es la que aporta el músculo jurídico al proyecto.
Antonio, devuélvele el capotazo…
Antonio. Soraya es una fuerza de la naturaleza: la admiración es totalmente recíproca. Además, se caracteriza por su generosidad y por su capacidad de trabajo. Soraya procede de la psicología y ha sido capaz de adaptarse para convertirse en una de las tecnólogas más importantes de este país. Más concretamente, ha sido capaz de desarrollar inteligencia artificial, por ejemplo, para conseguir en Chiara más de 200,000 combinaciones de feedback y 4.000 consejos grabados en la herramienta.
«La oratoria es el gran pain de la educación en España, y el 80% de la población sufre de glosofobia, el miedo a hablar en público»
Sigamos con este buen rollo, porque os tengo que decir que en Lefebvre están muy contentos con vuestro proyecto, elegido como finalista en su aceleradora LightSpeed. ¿Cuáles son vuestros objetivos, teniendo en cuenta de que hablamos de una aceleradora, una iniciativa de acompañamiento a startups europeas a las que, digamos, ya le han salido los dientes?
Soraya. En LightSpeed nos dijeron «¡Exprimidnos!» Y lo estamos haciendo. Tenemos reuniones todas las semanas y nos están ayudando mucho. De hecho, también estuvimos acelerados por La Nave, en Madrid, y nada que ver. Nos están dando muchos recursos, nos ayudan en todos los ámbitos, desde la prueba de concepto hasta la estrategia de compañía, pasando por inbound marketing: estamos tocando todos los palos, no podemos pedir más. He pasado por cuatro aceleradoras, y a LightSpeed la recomiendo vivamente.
Antonio. La gran ventaja de Chiara es que es un producto redondo, a diferencia de otras startups. ¿Qué nos puede aportar Lefebvre? La penetración en el mercado. Estamos en negociaciones para establecer un acuerdo de distribución con ellos, tanto en España como en el resto de Europa, y además podemos adaptar Chiara al francés, cuando ahora está en español e inglés.
Vemos escalabilidad en cuanto a los idiomas y en la distribución en LatAm y en otros países. ¿También queréis escalar en cuanto a las materias que aborda Chiara?
Antonio. Chiara va a incorporar muy pronto desarrollos tecnológicos muy valiosos que van a afectar al análisis gestual y a la bidireccionalidad y a la interacción del usuario. Con todo esto, la posibilidad de desarrollar verticales es infinita: cómo comunicar a un paciente una enfermedad grave, cómo entrenar una red comercial con su argumentario de ventas, etc.
Todo muy enfocado a la comunicación, ¿no?
Soraya. Y a todo tipo de skills. Por ejemplo, vamos a trabajar sobre cómo hacer una entrevista, cómo motivar a una persona. Vamos a intentar tocar todas las skills. El gran reto, teniendo en cuenta que nuestro propósito es transformar la educación a través de la tecnología, será el MVP que hagamos sobre interacción, que ya hemos mencionado antes. Si somos capaces gracias al 5G de lograr esa interacción, Chiara se convertirá en un verdadero ‘monstruo’ y podremos tocar todo tipo de casos de uso.
«Chiara va a incorporar muy pronto desarrollos tecnológicos muy valiosos que van a afectar al análisis gestual y a la bidireccionalidad y a la interacción del usuario»
Has mencionado a la tecnología, Soraya. ¿Qué tecnología está presente en Chiara? Hemos identificado a la inteligencia artificial…
Soraya. Inteligencia artificial y también realidad virtual, procesamiento de lenguaje natural, análisis gestual a través de imagen. Esta última parte, el reconocimiento gestual, es muy interesante porque la gestualidad, según manifiestan muchos autores, está por encima de lo que estás diciendo. Y en 2015 vimos que, si el alumno llevaba las gafas de realidad virtual, no era posible analizar sus movimientos con las manos, su posición o postura, etc. Ahora somos capaces de detectar que está haciendo esa persona con las manos, con los hombros, con el cuerpo, a través del reconocimiento de imagen, que nos permite valorar si el alumno se mueve con demasiada rapidez, si tiene gestos parásitos, si está muy estático o si repite un mismo gesto varias veces.
De hecho, una de las funcionalidades de Chiara que más nos ha llamado la atención es esta posibilidad de analizar los parámetros más importantes de la comunicación. Habladnos un poco más sobre ello.
Soraya. La parte de analítica lo que hace es objetivar algo que hasta ahora no era objetivable. Cuando un alumno se forma en un aula, quien le da el feedback es un formador, que por muy bueno que sea, no dejar de ser un humano y, por lo tanto subjetivo, que puede proporcionar sin querer un feedback incorrecto a ese alumno ya que no podemos medir objetivamente. Pero es que además un ser humano no es capaz de medir al mismo tiempo todo lo que puede medir la inteligencia artificial. Chiara es capaz de medir 25 KPI’s diferentes al mismo tiempo, como los decibelios que empleas al hablar, o tu volumen a través de hercios, la velocidad de palabras por minuto, el número de coletillas que más repites y, al mismo tiempo, mide, por ejemplo, dónde estás mirando. Todo eso un ser humano no lo puede hacer.
Se trata entonces de evaluar no en base a sensaciones, si no de datos…
Soraya. Esa es la parte de analítica que de alguna forma objetiviza algo tan subjetivo como una soft skill.
«Chiara es capaz de medir 25 KPI’s diferentes al mismo tiempo»
Las tutorías están muy bien valoradas por los alumnos a la hora de elegir un programa formativo. Vosotros, y eso también nos ha llamado la atención, proporcionáis un coaching 100% personalizado. ¿Qué formato tiene esta funcionalidad?
Antonio. Cuando el alumno envía su práctica, Chiara empieza a analizar y cuando se termina el análisis de su presentación con los 25 KPI’s que hemos citado, te ofrece un feedback de dos maneras: primero te aparece un coach que puede decir que en tu última presentación la velocidad ha sido perfecta, o que te recomienda ejercicios si tu discurso ha sido monótono. Sobre la base de lo que ha escuchado de ti te proporciona las diferentes combinaciones: como hemos dicho antes, más de 200.000 combinaciones de feedback y más de 4.000 consejos. Lo va a hacer en un vídeo de seis a nueve minutos por cada práctica que el alumno envíe, en el que le dirá qué ha hecho bien y qué ha hecho mal. La gran ventaja es que es inmediato, porque para modificar las conductas necesitas un feedback muy próximo.
Esa inmediatez de la que habláis es un factor que acerca mucho este modelo a la formación presencial…
Soraya. Para nosotros era un reto porque psicológicamente está demostrado que si tú corriges un comportamiento inmediatamente después de haberse producido, tiene muchísimo más efecto que si dejas pasar un cierto tiempo.
Hay otra funcionalidad que nos mola mucho y es la que llamáis mapa de calor y que puede medir el reparto de miradas que realiza el alumno entre sus oyentes.
Antonio. Yo imparto muchas clases y me gusta hablar en público, y esta funcionalidad me hizo consciente de que dirijo mi mirada a la gente de mi derecha e ignoro a los de mi izquierda, probablemente por cómo están situadas las tarimas en las clases. Ahora, cuando hablo en público, cuando estoy en una sala, reparto mucho más la mirada porque soy consciente de algo que hacía mal. El mapa de calor ofrece datos muy interesantes. Imagina que estás en una sala negociando un tema y estás prestando atención sólo a una persona, que resulta que no es la que decide. Por muy bien que hagas, tienes todas las de perder.
Entiendo que, con vuestra experiencia en empresas y directivos, Chiara Legal no sólo va dirigido a estudiantes de Derecho sino a todo tipo de profesionales jurídicos, la mayoría de los cuales no han tenido acceso al desarrollo de este tipo de habilidades comunicativas.
Antonio. En realidad, va dirigida al 80% de la población, que es el porcentaje que tiene miedo a hablar en público. Es una soft skill fundamental (y me pone negro que todavía se las llame habilidades blandas). Por ejemplo, hay un módulo que llamamos de comunicación de influencias, cómo convencer a tu audiencia. ¿A quién no le es útil esta capacidad?